Entre el 19 de febrero y el 2 de mayo de 1812, las fuerzas insurgentes de José María Morelos resistieron el sitio de las tropas realistas del Brigadier Calleja en Cuautla, al sur de la capital de la Nueva España.

Muy difíciles eran las condiciones de los sitiados, sin suficientes armas ni alimento. En una famosa carta, fechada el 4 de abril de 1812, Morelos decía a Calleja: “El que muere por la verdadera religión y por su patria, no muere infausta sino gloriosamente. Usted, que quiere morir por la de Napoleón, acabará del modo que señala a otros”.

Y en una de las cartas firmadas en febrero y marzo de 1812 desde Cuautla, hacía un llamado a los criollos novohispanos a no derramar su sangre peleando por España. En la primera escribió:

Amados hermanos: Nuestra sentencia no es otra sino que los criollos gobiernen al reino y que los gachupines se vayan a su tierra o con su amigo el francés que pretende corromper nuestra religión. Ya no hay España, porque el francés está apoderado de ella. Ya no hay Fernando VII, porque o él se quiso ir a su casa de Borbón a Francia y entonces no estamos obligados a reconocerlo por rey, o lo llevaron a la fuerza y entonces ya no existe, Y aunque estuviera, a un reino conquistado le es lícito no obedecer a su rey, cuando es gravoso en sus leyes, que se hacen insoportables, como las que de día en día nos iban recargando en este reino.

Tema 1. Los primeros años

Tema 2. La geografía de la guerra: 1810-1815

Tema 3. Protagonistas de la insurgencia

Tema 4. El espacio de la democracia católica: geografía política de una utopía

Tema 5. La jornada de un jefe insurgente

Tema 6. Captura, juicio y muerte